Los 36 Tattvas del Tantra
Los 36 Tattvas del Tantra podrían ser considerados como las 36 características del Tantra. Es el conjunto de conceptos que debes tener en cuenta para acercarte al Tantrismo. Aunque a su vez, el tantrismo nos pide que nos alejemos de las ideas y conceptos y nos habla de la irrelevancia de la creencia: no importa si te consideras creyente o ateo. Solo tienes que conocer y comprender los 36 Tattvas para sumergirte en la conciencia plena.
En diversos libros se mencionan los tattvas o características del Tantra, aunque uno de los que ha tenido más repercusión ha sido ‘Tantra, la iniciación de un occidental al amor absoluto’. En este libro se explican uno a uno de forma detallada y se puede comprender con facilidad la relevancia de cada uno en nuestra vida diaria.
Los Tattvas son por tanto esenciales mientras practicamos el Tantra en clase con compañeros o en casa, pero también en nuestro día a día, en nuestra filosofía tántrica.
A continuación, nos acercamos a los 36 tattvas o categorías del universo para los shivaitas.
Pero recuerda, no por esto debemos apoyarnos en conceptos. La vida es cambio, para los tantristas, y lo que aprendas hoy no te servirá mañana, con esta idea debes acoger los conceptos.
Este apartado se resume en amar y comprender los elementos. Ellos son reales pero tu contacto superficial con ellos es irreal. Esto es lo que se repite en cada uno de los elementos.
El éter por cierto, es un elemento más ligero que el aire, pero algo más denso que el vacío.
Son vista, oído, olfato, gusto y tacto. Aunque realmente los shivaitas reemplazan la palabra vista por la palabra o concepto forma, la forma que tienen ante nuestros ojos.
- Olfato:Si hueles algo sientes ese olor. Pero el corazón de ese olor no es el olor.
- Gusto:toma avena, saboréala, penetra en el corazón del gusto, paladea la realidad que contiene todos los sabores. “El sabor único”.
- Vista/forma: la sin forma es la matriz de todas las formas del mundo. Los copos de avena cuando se cuecen pierden su forma original, reza el libro.
- Tacto:¿es posible que dos pieles se toquen por completo? Es imposible. ¿Es posible que cada milímetro de conciencia entre en contacto con lo divino?
- El sonido:es el corazón de la palabra. A través de ella puedes oír a todo el universo y se percibe como “om”. Todos los mantras se encuentran en el mantra OM.
Estos son los tattvas de la acción:
- Pies:para caminar con conciencia.
- Palabra: para abrir la conciencia, la palabra verdadera.
- Mano: Dar, transformar, recibir… la creatividad. La creación.
- Ano:La excreción debe ser siempre consciente. En ella dejamos pasar a través de nosotros lo que hemos absorbido.
- Sexo: Cuando dos cuerpos entran en contacto con conciencia plena, entran en otro espacio. El tiempo se desvanece, el placer se expande y hay un nuevo perfume.
Sin una profunda conexión con lo que nos rodea, no podemos abrirnos a la conciencia. La percepción es profundamente importante. Necesitamos percibir el sabor de una comida, el olor del amante, lo cálido de unas manos, el temblor de la tierra, el estremecimiento de un pequeño animal. Hay que sentir el mundo.
Los cinco tattvas de la percepción son nuestros cinco órganos: piel, orejas (oídos), lengua, ojos y nariz.
A continuación los cinco tattvas del pensamiento ligados a diferentes divinidades:
- La mente: La mente es de donde surge el pensamiento. Es la madre de todos ellos.
- La inteligencia: La inteligencia es la decisión, porque es la razón. Es el paso previo a la acción y nos guía.
- El ego: El ego nos limita porque lleva cualquier experiencia universal a lo personal.
Los dos últimos tattvas del pensamiento son por así decirlo dos caras de la misma moneda.
- Prakriti:Es la esencia universal. Está en todo y en todos, es una red, curiosamente también red es la palabra que asociamos al significado de Tantra. Esta red es conocida como el ovillo de Prakritri que todo lo rodea y lo conforma. Todo se transforma pero la red es la misma.
- Purusha:Purusha es la acción, es quien teje, quien necesita al ovillo para tejer. Purusha da forma, crea con la materia. Purusha pone las jerarquías, la forma, el orden… construye con la esencia primordial.
Para que Prakriti y Parusha puedan hacer, deben existir los 6 tattvas corazas. Otras 6 características del Tantra por decirlo de algún modo.
- Tiempo: La ilusión del tiempo nos limita. Pero hay que descubrir que es un límite artificial que se le ha impuesto a la conciencia y del que tiene que soltarse.
- Espacio: El espacio nos sitúa y es otra ilusión. El espacio nos hace elegir entre aquí o allí. Pero cuando la conciencia despierta percibe la omnipresencia, tu centro está en todas partes. Es como si te encontrarás en un pequeño estanque o en una olla y lo que crees que existe son sus límites, pero cuando llega la conciencia el estanque se desborda.
- Carencia: La carencia es otra ilusión la de la ausencia. La de que algo puede faltarnos o podemos recuperarlo. Esta ilusión nos impulsa a buscar una vía, un modo de eliminar esta carencia. Pero por mucho que logremos, siempre nos faltará algo. por ello, hay que abandonar la búsqueda. Todo está ya en nuestro interior.
- Capacidad de conocer: Tenemos sed de conocer y al igual que con la carencia, creemos que nos falta siempre un poco más. Pero el verdadero conocimiento emana del interior, no de la acumulación. Hay que abandonar los conocimientos adquiridos y mirar en quietud hacia el interior.
- Creatividad limitada: A veces llegamos a pensar incluso que carecemos de creatividad, y copiamos, y adoramos lo que hacen otros. Pero cuando comprendemos nuestra creatividad, nuestra admiración escapa a la dualidad.
Estos están ligados con las seis corazas.
- Toma de conciencia de la naturaleza:Quien practica el Tantra puede tener pequeños primeros destellos. Pero sin maestro, puede creer que esto es la última realización. Disocia entre la realidad y su éxtasis y puede decidir separarse del mundo. Pero entonces no hay verdadera vida espiritual, la vida es el verdadero camino al despertar.
- Subjetividad más profunda:Es cuando podemos permanecer en estado de éxtasis durante horas. Pero al final siempre vuelve al estado ordinario.
- Subjetividad superior:Ya no existe la sensación de unión con el universo, sino que él es el propio universo. No existe fuente ni fluir, es un Todo.
- Subjetividad absoluta:Este tattva son dos tattvas completamente interconectados y dependientes el uno del otro. Es la apertura total del corazón. Ya no hay dualidad, solo Shiva, al que simboliza el mantra Aham.
Y más allá de los 36 Tattvas está Parama Shiva, el Ser, más allá de todo concepto.
La función de los tattvas es ayudarte a meditar. Puedes elegir uno de ellos, como por ejemplo el sonido o bien el tacto. Aunque lo ideal no es comenzar a usarlos para tal fin, sino que cuando de forma natural aparezcan en nuestra vida recordemos su carácter sagrado y hagamos con ellos una meditación. De ese modo, estaremos en conciencia plena durante todo el día.
El Tantra a diferencia de otras corrientes, no busca lo absoluto alejándose de los fenómenos cotidianos. Todo cabe para derribar el ego.