Todo lo que no sabes de Tantra
¿Sabías que el Tantra es anterior a muchas religiones hoy conocidas?, ¿sabías que el Tantra es una ciencia?, ¿conoces el significado de la palabra Tantra?, ¿sabes cómo dar un beso tántrico?
Si esto te interesa, mejor sigue leyendo, descubrirás todo lo que no sabes sobre el Tantra
La mayoría de los occidentales relacionan el Tantra con el sexo. Sin embargo, el Tantra es mucho más que sexo, solo una parte muy pequeña del Tantra se destina a él y esto es así porque el Tantra a diferencia de otros caminos espirituales no trata de anular el deseo o el instinto apasionado. Todo lo contrario, te enseñará a utilizarlo en tu beneficio propio.
El Tantra enseña a emplear la energía sexual para alcanzar una conciencia superior. Esta energía sexual no es lo mismo que la excitación, sino que es una energía que proviene del chakra raíz.
Tantra significa teoría, sistema, contexto… aunque su significado literal puede ser malla o tejido. Por ello debes entender que malla, red o tejido se refiere precisamente a nuestro contexto. No obstante, la palabra Tantra proviene del sánscrito y por ello tiene por un lado, un significado etimológico en el que Tan significa expandir y Tra instrumento, por lo que Tantra sería un instrumento para la expansión.
Y por otro lado, la etimología interpretativa o nirukta, en el que este instrumento para la expansión habla de los 36 Tattvas y del ciclo del sufrimiento. Es decir, el Tantra es la herramienta para liberarnos del ciclo del sufrimiento.
Los occidentales asociamos el Tantra al sexo y por ello creemos que el Tantra no es para niños. Pero esto no es cierto, el Tantra no es sexo, es un conjunto de prácticas relacionadas con la meditación, el despertar y la conciencia plena y nos ayuda a emjorar nuestra relación con el entorno y con nosotros mismos.
Por tanto, los niños pueden practicar Tantra aunque a un nivel diferente y mejorarán su atención, su autoestima, su capacidad cognitiva, etcétera.
Algo que no sabes del Tantra es que es una ciencia y gracias a una serie de experimentos se han demostrado sus beneficios para la salud.
Por ejemplo, una investigación de 2015 realizada por el Laboratorio de Estudios del Estrés (Laabest) de la Universidad de San Pablo en Brasil evaluó cómo afectaba al estrés la práctica en un grupo de casi 30 voluntarios. Durante semanas los individuos practicaron Tantra y midieron sus niveles de cortisol en la saliva. En solo una semana el cortisol, o sea, el estrés se había reducido en un 45%. Además, había mejorado el bienestar psicológico y se había reducido la fatiga.
Hay técnicas para dar un beso tántrico y el objetivo es liberar los chakras aprovechando la pasión y el deseo amoroso del beso.
Para hacerlo debes estar relajado y tus labios no pueden estar tensos, también la mandíbula y el resto de músculos faciales deben estar relajados. Solo así se puede dar un beso tántrico.
Por supuesto, antes es recomendable haber meditado con tu pareja y hacerlo en un momento de deseo sexual.
Poco a poco comprobarás que las emociones son mucho más intensas y que incluye un alto componente emocional y espiritual.
La mirada tántrica no es demasiado conocida y sin embargo, debes aprenderla cuanto antes pues te ayudará a llevar una vida tántrica más allá de las clases con tu profesor.
La mirada tántrica puede practicarse consiste en ampliar tu visión en horizontal todo lo que puedas, como si tratarás de ver más allá de 180º. Cuando lo haces durante varios minutos comprobarás cómo tu perspectiva y también tu estado mental ha cambiado.
En el Tantra hay Dioses pero el Tantra no es una religión. ¿Cómo es esto posible?
El Tantra se afianza sobre hechos empíricos, son verificables, no son meras conjeturas. Por eso podemos hablar de el Tantra como una ciencia, pues a diferencia de las religiones, su esencia no se basa en creencias relacionadas con la divinidad.
Los Dioses son personajes que ayudan a dar vida los conceptos y que ayudan a comprender mejor la filosofía que hay detrás del Tantra.
En el Tantra los conceptos son fundamentales. Por un lado, nos ayudará a nombrar partes de nuestro cuerpo de una forma más exacta, nos ayuda a conocer los canales de energía y todo lo que ocurrirá en nuestro cuerpo cuando practiquemos Tantra. El Tantra tiene su propio lenguaje y es necesario que conozcas algunas de las palabras para comunicarte mejor con tu profesor o tus compañeros. Algunas de estas pueden ser: chakras, kundalini, conciencia plena, asana, etcétera.
Sí, el Tantra es muy antiguo y es difícil de conocer su origen. A diferencia de otras corrientes espirituales, las enseñanzas del Tantra no se escribieron hasta el siglo VI a.C. aproximadamente. Sin embargo, todo apunta a que muchas de sus técnicas son anteriores y eran practicadas por escuelas protohinduistas.
En este sentido el Tantra podría ser anterior al hinduismo y por supuesto es anterior al budismo, al cristianismo y al islam.
Según el Tantra no importa cuanto tiempo lleves practicando Tantra ni lo experto que te creas en esta ciencia, la iluminación llegará cuando tenga que llegar. Puede ser alcanzada por un aprendiz que acaba de iniciarse o por una persona que se considere un maestro.
Por eso lo mejor es no tener prisa y aprender a practicar correctamente los ejercicios.
Así es, el Tantra acepta el mundo dual, donde hay bien y mal, pero se trata de trascenderlo y por ello debes dejar de relacionarte contigo mismo en base a características personales que consideres buenas o malas.
No tienes virtudes o defectos, sino más bien un carácter que además de que puede ser moldeado a tu antojo una vez tengas más conocimientos de Tantra, debes saber aprovechar. No se trata de limar aristas, sino de aceptarte como eres y valerte de ti mismo para alcanzar la consciencia plena.