Tantra para mujeres

Tantra para mujeres

¿Qué es el Tantra para mujeres? ¿Qué prácticas se llevan a cabo? ¿Cuándo podemos practicarlo? ¿Existe un lado masculino y un lado femenino? Todas estas preguntas tendrán respuesta unos párrafos más abajo.

Lo importante por ahora es que comprendas que todas las personas pueden acercarse al Tantra del mismo modo. Que todos tenemos un aspecto llamado masculino y otro llamado femenino. Lo habitual es que las mujeres tengan su lado femenino más potenciado, y los hombres su lado masculino.

No obstante, esto cada vez es menos así, pues aquello que consideramos como masculino, en una sociedad estrictamente patriarcal, está relacionado con virtudes, pero aquello femenino a menudo está relacionado con defectos. Por ello es común que tanto hombres como mujeres potencien su lado masculino y se olviden del femenino.

Tener un buen equilibrio es necesario para la correcta práctica del Tantra. Recuerda que nadie, ni hombre ni mujer debe completarte para alcanzar la iluminación, esta es solo una de las vías, pero ni siquiera es la más habitual. Tú misma estás completa y tienes las dos polaridades dentro de ti.

Dicho esto, el Tantra para mujeres puede ser diferente al Tantra para hombres, y habrá mujeres a las que les resulte más efectivo. Quizá tú seas una de ellas.

¿Qué hablamos cuando decimos Tantra para mujeres?

El Tantra es uno y a pesar de que pueda contar con diferentes escuelas, estas no están separadas por sexo. Por lo que no existe como tal un Tantra para mujeres, sino un conjunto de prácticas o una visión más específica del Tantra que puede ser más adecuada para mujeres que para hombres.

¿Por qué? No porque la mujer deba acercarse de una forma diferente al Tantra, sino porque han sido educadas de forma diferente al varón.

Por ejemplo, la visión hacia el sexo suele ser diferente, también su relación con el cuerpo, con los otros…

Características del Tantra para mujeres

Para potenciar la energía femenina, debemos acudir a la fuente, a Shakti, a Khali… Es bueno comenzar familiarizándose con la Gran Diosa, con las diferentes Devis y que comprendas el poder de la energía femenina.

En segundo lugar, debes comprender que aquellas virtudes que socialmente te habían presentado como femeninas, igual no lo son tanto, y otras que no habías contemplado es lo que en el Tantra puede considerarse energía femenina.

El tantra para mujeres busca conectar con tu lado femenino, reencontrarte con él. Pero también, hacerte consciente de que tienes un lado masculino.

Características del Tantra para mujeres:

  • Búsqueda de la mujer perdida: recupera la forma de ser mujer, que no es otra que como tú verdaderamente eres. Muéstrate y pierde las normas impuestas sobre la feminidad.
  • Autoconocimiento: el tantra para mujeres busca un mayor conocimiento del cuerpo, al que la mujer está ligada y del que se la ha apartado o se la ha tratado de unir de una forma perjudicial. Conoce tus ciclos, tus cambios hormonales, tus deseos…
  • Conéctate: eres un ser de la naturaleza, uno más, formas parte de ella y debes re – conectar. Aléjate de la urbe, contempla la naturaleza y descubre cuánto de ti tiene que ver con lo que observas.
  • Sexualidad consciente: Recientemente la mujer debía ser recatada, pudorosa, casi frígida, pero lo suficientemente sexual como para satisfacer a su marido y ahora, debe alejar sus emociones del sexo y contar con múltiples parejas sexuales. Probablemente no te sientas identificada con ninguna de estas ideas. En el Tantra para mujeres se busca que cada una encuentre su forma de sexualidad y viva acorde a ella, sin prejuicios y sobre todo, conectando la sexualidad con un fin aún mayor.
  • Confianza y libertad: el Tantra nos invita a ser espontáneos, a mostrarnos tal y como somos. Esto, en ocasiones puede ser más difícil de asumir para las mujeres, que tienen más dificultad para mostrar su rabia, su ira, para mostrarse competitivas o enérgicas sin ser tildadas de masculinas, etcétera. A la vez, si no se muestran así, también parece haber un problema y resultan demasiado débiles. En resumen, al hombre se le dan más licencias en su comportamiento, por lo que mostrarte tal y como eres sin sentir el yugo de la sociedad es uno de los objetivos del Tantra para mujeres.
Etapas en el Tantra para mujeres

El Tantra para mujeres se puede dividir en etapas. Por ejemplo, en la infancia, la adolescencia, el embarazo, la vejez… El motivo es que el Tantra a diferencia de otras doctrinas, no lucha contra el cuerpo y no lo ve como un simple envoltorio o cárcel de la que liberarse, sino como una manifestación de lo sagrado.

El cuerpo debemos trabajarlo y conectarlo para llegar a la iluminación, por eso es importante conocerlo, saber cómo se encuentra y de este modo elegir la vía más adecuada para fortalecernos y llegar a la no – dualidad.

Estas son algunas de las etapas del Tantra para mujeres:

  • La infancia: Hay padres y madres que deciden iniciar a sus hijas al Tantra lo antes posible. Saben que esto les permitirá una mayor conciencia de su cuerpo en la época en la que comienzan a conocerlo y a comprender sus potencialidades. También, es un inicio al acercamiento mente – cuerpo. La concentración, las respiraciones… son técnicas que les ayudarán toda su vida.
  • La adolescencia: Siempre decimos que la adolescencia es una etapa difícil pero pocas veces se menciona que es una etapa de gran belleza. Es un momento en el que nos conocemos de forma diferente, un momento en el que el cuerpo es el protagonista y también, en el que nos sentimos con mayor energía. Por eso, el Tantra para mujeres en esta etapa se centra en canalizarla correctamente.
  • La madurez: es el momento en el que la mayor parte de las mujeres se acerca al Tantra. Es la plenitud y el momento de mayor conocimiento.
  • La menopausia: no tiene que ser un momento difícil, y el Tantra para mujeres se encarga de descubrir las diferentes virtudes de este momento y cambio de etapa en el que perdemos y ganamos a partes iguales.
  • La vejez: Es quizá el momento más necesario para practicar el Tantra. Es cuando acudimos con mayor deseo a la espiritualidad y a la comprensión y cuando creemos que el cuerpo deja de importar. Pero el Tantra tiene que recordar que para ascender, debemos haber entrado en comunión con cuerpo y mente.

Por último, existen cursos y talleres de Tantra para mujeres embarazadas que te despertarán una forma diferente de maternidad.

Masaje Yoni: qué es y cómo hacerlo

Masaje Yoni: qué es y cómo hacerlo

Yoni significa fuente de vida o espacio sagrado en sánscrito y hace alusión a la vagina. El masaje de Yoni es, por tanto, un masaje que se le hace a la zona genital de la mujer. Puede hacerlo ella sola o su pareja, aunque lo más recomendable es que la primera vez la guíe un especialista.  

¿Qué es el Yoni en Tantra?

La definición no está clara, Yoni hace referencia a la genitalidad femenina en general. Podemos usarlo para referirnos al útero, a la vagina o a la vulva. De hecho, el masaje del Yoni puede incluir estas dos últimas.

Otras posibles acepciones son semilla, fuente, receptáculo o nido. Y por supuesto, es entendido como símbolo de la energía de procreación femenina.

Beneficios de hacer un masaje Yoni

Hacer un masaje Yoni requiere de tiempo  y también conocimientos básicos de respiración. Te ayuda a mejorar el nivel de autoconocimiento, autoestima, vínculos emocionales, placer y espiritualidad. 

Beneficios:

  • Mejores orgasmos: Lo primero que tienes que tener claro, es que el objetivo del masaje del yoni no es el orgasmo, es una consecuencia natural. No hay que evitar el orgasmo ni buscarlo. No obstante, cuando los experimentes durante el masaje serán más placenteros y duraderos y a la larga, si realizas el masaje con frecuencia, se volverán más expandidos.
  • Elimina los dolores menstruales y durante las relaciones: Masajea la zona pélvica y ayuda a reducir algunos dolores que sienten las mujeres durante la penetración o durante el sangrado.
  • Sube la libido: Conocerás todo el placer que puedes despertar. Esto acrecentará tus ganas de seguir experimentando.
  • Mejora el vínculo con la pareja: os ayudará a descubriros juntos.

«Conocimiento del cuerpo: probablemente encuentres pequeños placeres alojados en rincones de tu vulva, que no imaginabas.»

Cómo hacer un masaje Yoni

Hacer un masaje yoni no es tan difícil como podrías creer. De hecho, seguro que cuando te masturbas realizas algunos movimientos muy parecidos.

¿Qué es un masaje Yoni y para qué sirve?
El masaje yoni es una práctica antigua que ayuda a las mujeres a retornar a un equilibrio y sanar emociones, además de conectarlas con su sexualidad y su energía femenina.

Cómo hacer un masaje Yoni

Hacerlo paso a paso

En primer lugar, busca un sitio tranquilo donde estés sola o con tu pareja. Puedes poner incienso, velas, música… y comprar algún aceite para masajes: fundamental. A mí personalmente me gusta el aceite de coco orgánico, va fenomenal para las zonas más íntimas.

En primer lugar tú o tu pareja masajead el vientre con las manos, por la zona del bajo vientre hasta las costillas y luego poco a poco hacia arriba, hasta llegar a los senos. Es importante no acariciar con fuerza ni con demasiada ligereza. Un punto medio. Se pueden estimular los pezones hasta que queden erectos.

El tiempo lo marcas tú, debe ser el suficiente como para que te sientas excitada pero a la vez, relajada y tranquila. Acompaña siempre el proceso con respiraciones lentas de Tantra

A continuación tú misma (o tu pareja) debes  bajar hasta la vulva y abrazarla con la palma de tu mano, tratando de cubrirla por entero. Mantente así un tiempo y aprieta ligeramente tu mano mientas comienzas a moverla en círculos. 

Tienes que comenzar a notar las yemas de tus dedos y acercarlos al clítoris, pero sin tocarlo directamente. Masajea también los labios externos e internos, ve de unos a otros y vuelve al clítoris haciendo círculos concéntricos, hacia dentro cuando estés lejos y hacia fuera cuando estés llegando.

Luego, coloca un dedo a cada lado de tu clítoris y muévelos hacia arriba y hacia abajo para ocultarlo y destaparlo de su capuchón. Luego haz este mismo movimiento con toda tu vulva, ve con tus dedos desde tu clítoris a la abertura de la vagina y silo deseas penétrate hasta estimular tu punto G.

El final

Luego, vuelve a estimular tu clítoris en círculos como al principio hacia arriba y hacia abajo. Puedes detenerte durante el orgasmo, llegue o no llegue, lo importante es que alcances un punto de excitación diferente. De quietud y paz mental en máxima conexión con todo tu cuerpo.

Esto puedes realizarlo tantas veces como desees. Y recuerda, que el masaje yoni no es ningún tipo de preliminar, sino una práctica sexual en sí misma, la finalidad no es otra que el propio masaje yoni. A su vez puede der muy sanador.

Masaje Lingam: qué es y cómo hacerlo

Masaje Lingam: qué es y cómo hacerlo

El masaje lingam es el masaje del pene, o mejor dicho de toda la zona genital masculina, por lo que también incluye el escroto, los testículos y el perineo. Aunque pudiera parecer que el objetivo último es el placer, en realidad tiene un propósito mucho más elevado, el autoconocimiento, la sanación y el vínculo con la pareja en su caso.

Debe ser comprendido como una forma diferente y más pausada de masturbación Su objetivo no es el orgasmo o la eyaculación. Al mismo tiempo, tampoco la pares si llega. Aunque en el Tantra en muchas ocasiones se evita la eyaculación masculina, para que la energía no se vaya del cuerpo, evitarla de forma muy persistente no es del todo recomendable.

Historia del Lingam

Hay una historia curiosa acerca del Lingam. El Dios Shiva a quien asociamos el Lingam, decidió ir al bosque de Deodora a visitar a unos místicos que lo adoraban. Entonces, comenzó a bailar desnudo delante de ellos mientras realizaba movimientos sensuales y excitaba a las hijas de esta tribu de sabios.

Ellos, incapaces de reconocer al Dios, encolerizaron y pidieron que su pene cayera del cuerpo. Y esto ocurrió, después de lo cual una columna de luz arrasó la tierra y los campos ardieron.

Estos sabios a pesar de haber estado meditando y ayunando se dejaron llevar por lo superfluo y demostraron no estar por encima de lo mundano. Le pidieron ayuda a Brahma y este mandó a la Diosa Parvati en forma de vagina para capturar al falo divino.

Beneficios del masaje Lingam

El beneficio no es el orgasmo que probablemente alcanzarás si lo realizas, sino todas las sensaciones nuevas que descubrirás. Además de animarte a tocar zonas erógenas que quizá nunca antes habías probado.

Esto mejorará la conexión con la pareja, la percepción del propio cuerpo y te ayudará a liberarte de barreras y tabúes, un requisito del Tantra.

Cómo hacer un masaje Lingam paso a paso

En primer lugar busca un sitio tranquilo, incluye música relajante y velas o incienso. Puedes hacerlo tú solo o con ayuda de tu pareja.

Estimulación previa

Primero, túmbate boca arriba y puedes incluir una almohada pequeña debajo del culo, de forma que tus genitales queden más expuestos. Relájate y lleva una respiración lenta y profunda.

Tú o tu pareja podéis comenzar a masajear los muslos, las ingles y bajo vientre para después acercarte a la zona del pene.

Estimulación del Lingam hacia arriba

Ahora sí, lleva la palma de tu mano hacia tu pene que debe estar aún en reposo. La otra, debes llevarla a la zona de los testículos. Entonces con ambas haz movimientos hacia arriba presionando con la palma de la mano, pero tampoco en exceso. 

Sube las manos hacia arriba y sin apretar vuelve a bajarlas para hacer el mismo movimiento. Los movimientos ascendentes deben llevar el mismo ritmo en el masaje lingam.

También puedes colocar los pulgares sobre el glande mientras abrazas el lingam con las manos puedes masajear suavemente con los pulgares y bajar hasta los testículos con las manos abrazadas al lingam.

Hay más movimientos que te podría contar, aunque lo mejor es que explores por ti mismo o tu pareja nuevos movimientos y formas de masaje lingam.

El perineo y punto sagrado

Tras esto, puedes acercar más los dedos de la mano que se encuentran en los testículos, al perineo. Allí se encuentran muchas tensiones, por lo que es recomendable realizar un pequeño masaje hasta que notes como se libera la energía. Con la otra mano puedes seguir masajeando el lingam o pene.

Luego, si te sientes preparado puedes introducir tus dedos (o tu pareja) o algún juguete sexual en el ano y buscar el punto sagrado (punto P), donde se encuentra la próstata. Este masaje junto con el del Lingam, provocarán una sensación verdaderamente placentera que se expandirá por todo tu cuerpo. Aunque con el primer masaje en una primera sesión, es más que suficiente.